Viajar es una de mis grandes pasiones, una pena que por diferentes motivos no pueda ir a todos los lugares que quisiera.



De todos modos comprobaréis que sin alejarnos demasiado podemos descubrir sitios preciosos.



Aqui iré subiendo algunas fotos de sitios que he visitado y de los que guardo un grato recuerdo.















domingo, 1 de enero de 2012

BOMBARRAL.- Eden Buddha

En agosto de 2011, ya finalizando las vacaciones, nos acercamos a disfrutar de las playas de Peniche y Baleal, así como de sus buenos pescados y de unas jornadas de relajación en las magnificas intalaciones del hotel Praia Norte.

Al  regreso, nos desviamos un poco de nuestra ruta para llegar al  " Eden Budha" un inmenso jardín dedicado a Buda  en la Quinta dos Loridos , en la localidad portuguesa de Bombarral.



Impresionante la cantidad de estatuas de granito y  marmol que puedes contemplar en este jardín, de 35 hectareas,  propiedad de José Berardo, una de los empresarios más ricos del país vecino y del mundo, y gran coleccionista de obras de arte, como puede verse en el museo Colección Berardo del Centro Cultural de  Belem, en Lisboa.
En 2001, tras la destrucción de los Budas de Bamyan en Afganistán por los talibanes, Berardo decidió construir  un jardín oriental como contrapartida, el Buddha Eden Garden, en las cercanías de Bombarral, en homenaje a las esculturas destruidas por el fanatismo y, también, como lugar de reflexión y meditación.

A ambos lado de los senderos que recorren la finca aparecen enormes Budas de granito y ya adentrandonos en el alcornocal nos encontramos con los dinteles rojos que nos marcan la entrada a los lugares sagrados.

La parte principal del jardín  se encuentra al final de una escalinata de ladrillo, y en su alto la  figura de un gran  Buda recostado .


También en lo alto de la colina y rodeando  el  lago, aparecen cientos de figuras , imitación de  los  Guerreros de Terracota pero de bonito  colorido.
Después de una gran caminata, o si no quieres caminar  puedes hacer la visita en un pequeño tren que recorre todo el jardín,  podemos relajarnos un ratito en el lago. En su centro se encuentra una pagoda  y lo rodean multitud de estatuas.



Y para reponer fuerzas nada mejor que pasar por su cafetería-restaurante y probar algunas de sus especialidades, así como de los caldos que se elaboran en la Quinta y que puedes comprar a la salida , pues es de obligada necesidad salir por su tienda de vinos.